1820 – 20 DE JUNIO – 2021
201° ANIVERSARIO DE LA MUERTE DE MANUEL BELGRANO
Manuel Belgrano nació en Buenos Aires el 3 de junio de 1770. Estudió en el Colegio de San Carlos y luego en España, en las Universidades de Valladolid y Salamanca. Llegó a Europa en plena Revolución Francesa y vivió intensamente el clima de ideas de la época. Así pudo tomar contacto con las ideas de Rousseau, Voltaire, Adam Smith y al fisiócrata Quesnay.
Regresa al país con estas ideas como inspiración, obsesionado con el fomento de la agricultura y la industria, en detrimento de la ganadería que, por un lado, fomentaba espíritus perezosos al prometer riqueza fácil y no desarrollar la inventiva; y, por otro, daba trabajo a muy poca gente y concentraba la riqueza en pocas manos.
Belgrano fue el primero en proponer una estrategia de crecimiento económico y social del país centrada en: una verdadera Reforma Agraria basada en la expropiación de las tierras improductivas para entregárselas a los sectores desposeídos, el fomento de la educación popular y la industria
En 1812 asumió la jefatura del Ejército del Norte y, historia conocida, creó y enarboló por primera vez, en las barrancas rosarinas del Paraná, la bandera azul y blanca que habría de convertirse en enseña oficial de la nación. Al mando de sus tropas venció a las fuerzas españolas en las estratégicas batallas de Tucumán (1812) y Salta (1813), que salvaguardaron la independencia argentina al contener la contraofensiva realista lanzada desde el norte; pero en 1813 volvió a ser derrotado cuando intentaba proseguir su avance invadiendo el Alto Perú (la actual Bolivia), que quedó bajo el dominio de los españoles.
Estas derrotas le valieron la destitución del mando militar, pero siguió apoyando la causa independentista a través de una misión diplomática en Europa con el objetivo que sea reconocida nuestra soberanía e independencia de España.
Vuelve al país para participar del Congreso de Tucumán (1816) y ponerse nuevamente al frente del Ejército Auxiliar de Perú, cooperando con Güemes y sus gauchos, conocidos como “Los infernales”, para frenar una contraofensiva española.
En 1819 debe abandonar el Ejército por encontrarse gravemente enfermo, regresa a Buenos Aires, sumido en la pobreza y el olvido de las autoridades nacionales y, finalmente, muere, en total soledad, el 20 de junio de 1820.